Rivera del Muelle, 5. Puerto Real, Cádiz, España. 11510. Miércoles, jueves y viernes de 18:00 a 20:30. cf76juanrivera@gmail.com. +34 856097018

sábado, 13 de marzo de 2010

Pa que se lo lleve uno de fuera...

Semanas se lleva discutiendo la idea de ampliar nuestro concurso nacional permitiendo la participación de fotógrafos de otros países, tarea muy sencilla hoy día gracias a Internet. Algo pica por ahí cuando el debate se lleva y se trae de manera constante y con los ánimos bastante caldeados. Es extraño que una medida que lo único que hace es beneficiarnos cuente con tantos detractores. A continuación se exponen las razones de los que creen que no merece la pena entrar por ahí:

1)"Es que después hay que devolver las fotos y nos cuesta muy caro". En la mayoría de los concursos actuales las fotos no se devuelven a menos que las solicite su dueño y, en caso de que no sea así, se piden sellos con la foto para realizar la devolución. Hace unos años una foto era un trabajo artesanal con horas de laboratorio y era normal que los fotógrafos pretendieran recuperarla, pero hoy revelar una fotografía cuesta muy poco dinero y quien la envía a un concurso lo hace sabiendo que no va a pasar nada si no se la devuelven.

2)"Pa que nos pase lo del año año pasado con el premio de honor..." La coba que nos dieron el año pasado no tiene nada que ver con que el autor fuera argentino. Igual lo podría haber hecho uno de Salamanca. O de Cádiz, ya puestos. Una cosa es una fotografía, con su encuadre, su iluminación, su motivo y su disparo y otra un pastiche hecho con photoshop. Y lo nuestro es un concurso de fotografía, no de diseño.

3) "Siempre fue un concurso nacional, ¿para qué cambiarlo ahora?" Sin comentarios.

4) "Pa que el premio se lo lleve uno de fuera, nos lo llevamos nosotros". Literal. Esto se ha oído más de una vez. Si al final va a ser eso. Resulta que cuantas menos fotografías, más posibilidad de que los 500 euros nos lo quedemos nosotros. Me da pena pensarlo, pero todo apunta que, una vez más, la avaricia por quedarse con un premio nos lleva a meter la pata de manera estrepitosa. Es lo malo que tienen los concursos.

Un concurso con prestigio y con años a sus espaldas, que siempre se caracterizó por ser abierto y plural ("libre expresión" su nombre lo dice todo), tiene que evolucionar en esa línea. Extender su ámbito a nivel internacional nos permite recibir mucho más material y de más calidad, comprobar cuáles son las tendencias en otros lugares, aprender de lo que hace otra gente y, en definitiva, enriquecernos con la fotografía, que para eso tenemos montado un club.

Además, me extraña que los más veteranos del lugar sean los más reacios a entrar por aquí cuando ellos tuvieron el ejemplo de Juan Rivera, alma y motor del concurso y del mismo club. Persona innovadora, dinámica, moderna, con iniciativa y a la cual se pone de ejemplo en numerosas ocasiones como modelo a la hora de organizar cualquier cosa. Apuesto los 500 euros del premio de honor que si en tiempos de Juan hubiera existido Internet, hace muchísimos años que nuestro concurso se llamaría "Concurso Internacional de Fotografía Libre Expresión".